El Camino de los Francos por la depresión
mesoterciaria.
Dejando de lado la rasa costera de la Comarca de la Sidra ocupada por los territorios de Colunga y
Villaviciosa, paso ahora más al Sur a la llamada depresión mesoterciaria, en cuyo largo valle se
sitúan los concejos de Piloña, Nava y Sariego, aunque Piloña no está en Comarca
de la Sidra, pero nos servirá para explicar este Camino de los «francos». que ya viene de Panes y de Unquera, por ambos ramales una más maritimo y otro más pegado al interior..
Hay quien explica que tal camino viniera por uno de los ramales de la Vía Agripa, y que Gómez Arteche y otros historiadores suponían abierta desde Aquitania durante la campaña de Augusto, y que en Asturias enlazarse con Portus Victoriae, aunque hay otros historiadores que son escépticos ante la presencia de esta calzada.[1]
Hay quien explica que tal camino viniera por uno de los ramales de la Vía Agripa, y que Gómez Arteche y otros historiadores suponían abierta desde Aquitania durante la campaña de Augusto, y que en Asturias enlazarse con Portus Victoriae, aunque hay otros historiadores que son escépticos ante la presencia de esta calzada.[1]
Fuera como fuere, no deja de cierto que desde las
lindes asturianas por el Este vienen dos caminos francos, uno que se pega a la
cornisa atravesando los concejos de Ribadedeva, Llanes, Ribadesella y que
seguiría como tal Camino del Norte hacia Villaviciosa camino bien, de Oviedo o
de Gijón, para en ambos casos, por el Camino Primitivo o por la Costa, alcanzar
finalmente Compostela.
No hay que olvidar que parte de ese camino oriental
asturiano, conllevaba subirse unas siete veces a diversas barcas y pagar peaje
con cruzar los distintos brazos fluviales., lo que hacía según Soledad Beltrán
Suárez que «a ruta costera por Asturias es tardía y poco transitada al menos
hasta finales de la Edad Media, si hemos de juzgar por la escasez, cuando no
inexistencia, de testimonios de cualquier naturaleza que permitan reconstruirla
en algunos de sus tramos»[2].
Por tanto, es comprensible que los peregrinos o caminantes
en general, así como los arrieros optaran por un camino natural y cómodo y
protegido. De ahí que en Ribadesella se abriera un ramal llamado de los francos,
que vendría por una de las orillas del Rio Sella, hasta ganar la capital
parraguesa: Arriondas.
En este concejo y habría que analizar por donde llegaría
otro Camino que algunos denominan como Camino del Interior de Asturias, o de la
Calzada de Jana, que vendría ya de San Vicente de la Barquera, entrando por
Merodio hacia el núcleo fronterizo de Panes, y por el llamado surco
mesoterciario, que supondría cruzar los valles de las Peñamelleras, Cabrales,
Onis, Cangas de Onís y Parres, para junto con el ramal que vendría de
Ribadesella, ir ya juntos, como un solo camino hacia Infiesto cruzando todo el
concejo piloñés y entrando en el concejo naveto por Mures.[3]
Cruce del Rio Sella
Así nos lo describe Juan Uría Ríu: «Desde Arriondas el camino continuaba por el valle del
río Piloña al lugar de Villamayor, unos cinco kilómetros distantes de la villa
de Infiesto. Allí existía un monasterio de benedictinas cuya iglesia parece
edificada en el siglo XII… Más al oeste, y continuando a lo largo del valle por
el sur del río, hállase la villa de Infiesto…
En Infiesto se atravesaba un viejo
puente de dos arcos que aún existe, salvando el río Piloña, para continuar por
su margen izquierda a San Bartolomé de Nava, donde había un convento o priorato
de benedictinas, … De Nava el camino continuaba a la Pola de Siero, uniéndose
poco antes de llegar a esta villa con el que venía de Ribadesella por Vega de
Poja»[4]
En general este Camino jacobeo de la depresión
mesoterciaria viene marcado en algunas cartografías, y se marca por el eje
comunicacional de la Nª 634, sin embargo, sabemos que no fue así, pues
distintos testimonios y catas arqueológicas nos dan emplazamientos romanos que
nos indican que el citado Camino de los francos, venía por caminos
aledaños, lo cual ha sido tratado por diversos estudiosos y arqueólogos,[5] y
de lo cual ya Jovellanos había propuesto un eje comunicacional vinculado a
dicha depresión mesoterciaria.
Elias Carrocera, indica que será la «vía de la
Depresión Mesoterciaria la que se convirtió en una de las primeras rutas
utilizadas por los peregrinos para alcanzar Oviedo en su tránsito hacia
Galicia, y no será hasta más tarde, durante el siglo XIII, cuando empiece a
usarse, con cierta asiduidad, el denominado Camino de la Costa, que para
visitar al Salvador giraba hacia el interior en Villaviciosa».
Si el Camino del Norte está jalonado por las
ermitas e iglesias levantadas bajo la advocación de San Salvador, el Camino de
la Depresión mesoterciaria estará jalonada por las advocaciones hacia Santiago,
como sucede en Villaverde de Cangas de Onís, o aquella otra que contiene pinturas representando al clásico
Santiago matamoros como la de Santa María de Mones, o en Bargaedu y Buyeres , o
las esculturas en la capilla de Sofelguera en Infiesto, o en la iglesia de
Lodeña, o los diversos topónimos dedicados a Santiago como recoge Ciriaco de
Miguel Vigil «a propósito de una inscripción en el monasterio de San Bartolomé
de Nava de finales del siglo XV , en la que se hace referencia a la “ería de
Santiago que llaman de Cerulleda».[6]
El estudio que hacen ambos arqueólogos en la
Revista Nailos, aportan nombres relacionados con la caminería histórica en
general y con la jacobea en particular, citando el Caneyu y Venta en Ceceda, y
Camino francés o la Llosa Francia, sin olvidar la alusión fechada en 1493 del
Camino Francés en Nava, la cual e hace en Libro Prior de la Catedral de Oviedo.
Y aunque pudiera pensarse que dicho Camino de
Interior era algo desarrapado y fuera de control, como un camino marginal, pues
al leer el estudio de Elias Carrocera y
Luis Blanco, y sus buenos gráficos que adjunto, se podrá ver que era un camino bien custodiado.
Así mismo en esa franja de Camino nos encontramos en el siglo XVIII con los clásicos asentamientos en los diferentes libros de difuntos en las que se encuentran los asentamientos de fallecidos, como sucedió con «Theresa Olanda, era pobre e iva a Santiago» y que anota en el libro de San Pedro de Sebares, u otro que siendo vecino de Sevilla «peregrino que pasaba de Santiago a Nuestra Señora de Cobadonga».[7]
Observando la orografía de tal trazado pudiera
pensarse que los presumibles peregrinos hacia este camino por huir de
controles, y sin embargo ya hemos visto que no solo estaba bien custodiado,
sino que el Camino estaba jalonado por los más diversos inputs patrimoniales
religiosos, como deja ver la figura 14, que aportan los estudiosos Carrocera y
Blanco.
Trazado del Camino de los Francos por la
Comarca de la Sidra.
El Camino de los Francos, en la Comarca de la
Sidra entra procedente del vecino concejo de Piloña y se sitúa en los
territorios fronterizos a la altura de Mures, pero en realidad tras dejar el
núcleo de Villarriba y la casa del Barréu, nos sale un camino lateral a la
AS-336 por la cual se circula, por el cual nos adentramos, para dejar de lado
el ramal que sube a la Corona del Castro, y siguiendo rumbo Oeste, por un viejo
camino ya convertido casi en senda que va cruzar el pontón de factura romana
del Caneyu
Pontón
romano del Caneyu (Ceceda)
En el tránsito hacia el puente todavía queda
algún vestigio de suelo enlosado, este camino al llegar a la pista de La Corona
del Castro gira a la izquierda para subir al importante núcleo de Ceceda, son
su iglesia dedicada a San Miguel,
cuya vieja construcción databa del siglo XII, y pudiendo ver alguna ventana que
recuerda el paso jacobeo y pasando a su vez por delante de la capilla de Santa Catalina.
Se sale de tal villa por el barrio de Los Campos
hacia las aldeas de Llendón y Sienra, para de este modo ganar la aldea de San
Jose de Tresali, donde hubo un antiguo monasterio bajo la advocación de San Bartolomé,
y no es d extrañar pues en el concejo de Nava tuvo propiedades la Orden de
Santiago en el siglo XII.[8]
En el archivo de la catedral de Oviedo, nos dicen
Elías Carrocera y Luis Blanco, que hay un documento que dice: «Iten en la losa
que dizen de santiago un hero de tierra labradia en que puede aver quatro días
de bueys que se determina de la partede çima y de anbas fuentes heredad del
monesterio de sant bartolomé y de la otra fronte camino franzes».
Este Camino de los Francos, según los arqueólogos
citados, tuvo otros puentes como Fresnadiello, Tresali, Vagadali o la Güelga.
El camino como vemos es importante como son los
puentes para cruzar pequeñas riegas como en Caneyu, y en otras ocasiones son
más grandes como el Entrambosríos para cruzar el río Piloña, y salir a la
Ermita del Angel.
Diversas vistas del puente de Entrambosríos
(Nava)
Aunque también planteo que es muy posible que se
haya utilizado el trazado desde Ceceda del otro lado de la Nª 634, y que cruza
la Vega Ceceda por un impresionante puente, recién restaurado, arribando a la
Casa del Pozo la Reina, ganar el famoso molino de Fraynoquiso para seguir por
la Ermita de la Magdalena de Bueyes y por Polanava entrar en la villa y
capital: Nava.
En este enlace se puede leer el recorrido de
Oeste a Este, y el recorrido que se desarrolla por la otra orilla del río
Piloña.
Una vez en Nava, pese a la existencia de varios
vestigios que nos pudieran llevar a los caminantes francos, hacia topónimo
como el de Santiago a la altura del
Raigoso, y en Llames de Arriba, la Llosa Francia a lo que hay que sumar la
existencia de un antiguo monasterio en El Remedio, y la cercanía del enclave de
Lamasanti, ya camino de las tierras ovetenses, pues pero la cartografía
reseñada da un giro al camino de la peregrinatio, y marca un trazado que da la espalda a todo
ello, para subir al Norte por las aldeas
de Horizón y hacia la Ermita del Carmen de Paraes, para alcanzar la otra Emita
dedicada a San Esteban en Vioves hasta ganar el límite entre Nava y Sariego e
ir en una sucesión de badenes hasta el enclave sarageano de San Román, con unos
8 kilómetros recorridos. Todo este trayecto se haría a través de la actual
carretera AS-357.
De este modo se llegaría al empalme con el otro
camino que está perdido, y que desde La Campa o desde Arbazal vendría a San Román
de Sariego, yendo ahora juntos dirección Oeste por el Campón y por la carretera
SR-1, hasta llegar a la aldea de Pedrosa, al final de este núcleo se conecta
con el Camino Jacobeo que viene por Figares, y desde Pedrosa a la Cracavá para bajar ahora
al Sur, hacia Arbenti, dejando de lado la antigua iglesia de Santiago, ya que
se vira hacia la Vega donde se sigue por el Camino oficializado , dejando el límite
concejil a la altura de El Romeru, para dirigirse a los pueblos de Aveno y Vega de Poja,
dejando de lado la iglesia que se la relaciona con el templarismo, como es el
templo de Narzana.
Capiteles de la Iglesia de Vega de Poja y de
Narzana
La verdad es que no sé el sostén documental que
pudiera tener este Camino de los Francos, por las latitudes navetas y
sareganas, pero se me hace extraño esa escuadra que el trazado realiza en base
a subir al Norte hasta San Román, pudiendo ir en recto y en plano hacia
Lamasanti, pero hasta que nos encontremos otras explicaciones, eso es lo que
tenemos y así concluye este Camino de los Francos al paso por el Concejo
de Nava y Sariego.
[1] Uria Riu, Juan. La ruta de la Costa, en Las peregrinaciones a Santiago y San Salvador, Volumen 2. Pag 1225. Oviedo 2006.
[2] Beltrán Suárez. Soledad. El Camino de Santiago como elemento articulador del espacio en las Asturias Medieval. Navarra 1993.Pag. 215-216
[3] González García, Vicente José. El
Camino de Santiago a partir de su origen en Oviedo. Un camino para todos.
Oviedo 2014.
[4] Vázquez de Parga, Luis, Lacarra
Jose María y Uría Ríu, Juan. Las peregrinaciones a Santiago de Compostela.
Madrid
[5] Carrocera Fernandez, Elias. Blanco
Vázquez, Luis. El Camino de Santiago por la Depresión Mesoterciaria Central
Asturiana injustamente maltratado. Anejos de Nailos:
Estudios interdisciplinares de arqueología, ISSN 2341-3573, Nº. 3, 2016 (Ejemplar dedicado a: Estudios
sobre la Edad Media en el norte de la península
ibérica), págs. 289-307.
[6] Carrocera y Blanco, Ibidem.
[7] Martinez Vega, Andrés, El Camino
de Santiago a su paso por el valle del Piloña. En el Camino Jacobeo en
Asturias. Infiesto
[8] Ruano,
Benito